El milagro de la vida

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 Sentado en mi cama y con música clásica de fondo (una de las canciones de Bach) y con mi novia pacíficamente descasando a mi lado me dedico a escribir una nueva idea que tengo para el blog.

El nacimiento de un bebe. Que acto tan hermoso y emocionante, ¿verdad? Muy probablemente todos hemos vivido la emoción de saber que un nuevo miembro de la familia ha nacido. Otros quizás hasta hayan podido haber presenciado uno. Otros; o mejor dichos otras, fueron valientes participantes activas de uno. Seguro seguro todos hemos sido los protagonistas de un nacimiento. Una experiencia que marca vidas.

Tras el nacimiento de un bebe sigue la admiración por tan perfecta criatura. El saber que aunque existan algunos miedos de ¿qué pasará entonces?, ¿cómo se desenvolverán las cosas?, ¿qué cambiará o se mantendrá igual?, SIEMPRE se sabe que al final todo resultará perfectamente bien. Que es la criatura más perfecta que puede haber nacido y que su destino es la de crecer, desarrollarse, en fin: HACERSE GRANDE!

¿Cierto o falso? ¿Alguno de nosotros piensa de otra forma cuando pensamos en un bebe recién nacido? Niño o niña, flaquito o gordito, prematuro o a tiempo, no importa como sea; yo creo que todos tenemos la convicción de que crecerá para hacerse una persona de bien y que nos traerá mucha dicha y felicidad. Esto es la magia de la vida.

Bueno, yo acabo de dar a luz. Mientras pensaba hoy en lo que podría compartir con ustedes hoy mi mente fue gestando la idea de escribir estas palabras, y cada una de ellas es ahora un nuevo nacimiento. Un nacimiento que estoy seguro crecerá para hacerse grande. Que me traerá mucha dicha y felicidad así como un bebe lo hace con todo aquel con quien entra en contacto.

Todos nosotros damos a luz a ideas cada día. Cada vez que pensamos en alguna situación, algún problema, algo que resolver o hacer nuestra mente comienza a gestar las ideas que nos iluminarán en nuestro camino. Como mencioné en una de mis entradas anteriores, a medida que nuestra espiritualidad está más activa y nuestra conexión con aquella entidad a la que respetamos sea más pura, más fácilmente llegarán las ideas a su nacimiento.

Lo interesante es que no hay situación para la cual no nazca la idea perfecta. Como dice Albert Einstein:

“No es que sea muy inteligente, si no que me quedo con los problemas por más tiempo”

Sin embargo, aunque como Einstein nos hayamos quedado con el problema por más tiempo, dejamos que nuestro ego nos diga que no podemos hacer eso. O que nuestros miedos nos pongan a pensar en el y si no sale bien. E incluso a veces nuestro círculo de influencia el que nos susurra no vale, eso no es para ti.

¿Realmente piensas que una madre pensaría que no puede hacerlo? ¿O que los miedos superarían sus miedos de ser madre (o padre)? Sobre todo, ¿alguien dejaría de ser madre de un hermoso bebe por miedo al qué dirán los demás? No te voy a mentir, seguro que hay gente que encajaría en estos perfiles negativos. Pero no es precisamente el tipo de iluminación ni grandeza que querríamos alcanzar ¿verdad?

Entonces, ¿porqué dejar que todo esto pase con nuestras ideas? Si tantas veces has pedido o rezado por la solución a un problema y se te ocurre algo (ese algo que te susurra la intuición a veces y otras veces que se manifiesta como una idea más elaborada), ¿porqué negarle el derecho de nacer y hacerse grande? Así como sabemos que los bebes crecerán para ser grandes y desarrollarse, así mismo debemos acoger a nuestras ideas, con la misma aceptación de la idea de que se hará grande y será para nuestro mayor beneficio. Como dice Louise L Hay en su libro usted puede sanar su vida, tan sólo hay que estar consciente de que

“Toda Experiencia es un Éxito”

Entonces, ¿qué ideas te han llegado últimamente? ¿Alguna sobre cómo resolver algo? ¿La has rechazado o la has bendecido por ser parte de la solución? ¿La ves como el perfecto nacimiento de lo que se gestó en tu mente y que viene a hacerte feliz y darte dicha?

Díganme lo que piensan, si les gusta esto comenten acá abajo, compártanlo con sus amigos, ese en el que acaban de pensar, seguro él también necesita leer esto.

Vivan en Grandeza

HEJ