¿Qué pasaría si hoy trabajaras un poco más duro?

“Tú eres responsable por tu vida. Y el hacer lo más que puedas en este momento te pone en la mejor posición para el próximo momento” Oprah

Ciertamente, ayer hablábamos de cómo el enfocarte en el momento que vives ahora es la mejor estrategia para conseguir lo que quieres. Esta frase con la que abro el blog hoy recalca la importancia de dar y hacer tu mejor esfuerzo HOY, sabiendo que así construyes bases solidas para los retos del mañana.

Si la vida fuese una guerra, la frase de el Rey Leonidas en 300 sería apropiada: “mientras más sudes aquí (en Esparta entrenando) menos sangrarás en el campo de batalla”. Aunque no vayamos a afrontar un millón de persas, ni luchar a la orilla de un precipicio por nuestra libertad, igualmente vale la pena dar el todo por el todo en cada momento. Porque es la acumulación del esfuerzo y el trabajo lo que trae consigo la cosecha del mañana.

El granjero le da todo lo que tiene al campo hoy ya que sabe que eso le asegura una buena cosecha el día de mañana. Un día que se deje de esforzar en el campo, es un día más que tardará el campo en dar sus frutos. Aunque no vea la más mínima señal de frutos. Aunque el sol le queme los hombros o la lluvia le empantane sus pasos el granjero sigue dándole todo lo que tiene a su campo. Porque de un momento a otro sabe que el campo le dará justo lo mismo que él le ha dado.

Entrenar, estudiar, trabajar al límite de tus capacidades y habilidades te llena de vitalidad sabiendo que estás dando todo lo que tienes a tus proyectos y que ellos en recompensa te darán lo mismo. Si sabes ser paciente y mantener el esfuerzo un poco más allá de ese punto donde ya no puedes más puede que el éxito que buscas esté justo allí esperándote. Esperando a que soportes un poco más. Esperando a que te pruebes a ti mismo que puedes hacer más, y que por habértelo demostrado te mereces la recompensa que buscas.

Albert Einstein solía decir que “no es que yo sea más inteligente que los demás, si no que simplemente me quedo con los problemas por un rato más.” Pero se quedaba trabajando, se quedaba mentalizado y sabiendo que la solución llegaría! Así que seguía trabajando y aprendiendo a cada paso.

Decide hoy hacer tu mejor esfuerzo, hacerlo con la mejor actitud que tengas, usando todas tus capacidades y habilidades y ten confianza en que el resultado llegará.

Recuerda que justo cuando la oruga pensaba que todo estaba perdido, se convirtió en Mariposa.

Vivan en Grandeza,

HEJ